domingo, 3 de abril de 2022

De mí para mí.

 

Esta es una carta para mí, pues aunque escribirme es algo que, si me dejara llevar por lo que llevo sintiendo hacia mi desde hace tanto tiempo, jamás haría, concuerdo con que para ser fuerte necesito perdonarme y comenzar a enamorarme de mí como de nadie más lo haría.

Esta es una carta para decirme lo que siento, cómo me siento, dónde siento que estoy y qué siento que hay a mi alrededor.

Comencemos...

Te encuentras en medio de un estanque de fango y petróleo que se te pega por todos lados y no te deja avanzar, sientes que esto son tus pensamientos: terroríficos, asquerosos, lúgubres, desesperados, desesperanzados. Y cuando meditas lo ves claro. Los pensamientos de esperanza, de cariño, de luz, de amor... Esos pensamientos te traen una especie de energía lumínica llena de calor que te hacen volar y sentirte como un ángel en el cielo. Pero sin embargo el peso de los anteriormente mencionados supone una gravedad que te hace caer hacia el interior de un agujero negro que lleva años creciendo en tu interior y hundiéndote en ti mismx. Todo cambia bruscamente en función de adonde vayas... Sabes que en ti habitan estos pensamientos de petróleo negros y pegajosos que apenas te dejan respirar, y te da miedo pasar por ahí, pero no consigues todavía evitar que estos sigan invadiendo la motivación de la mayoría de tus actos. En cambio, transitar por los pensamientos de luz te da paz, alivio, pues es como volar entre nubes de edredón, llenas de plumas que te hacen sentir calentita y arropada por ti mismx. El problema reside en que la luz no es un hábito para ti, terrible fantasma que se arropa en el frío que le proporciona el odio y su oscuridad. Pero te resulta inevitable ver esto con optimismo, con comprensión, entendiendo los procesos y sus horarios... Tan solo hay que mirar a hace unos meses para vislumbrar el cambio, y para darse cuenta de que este mismo es progresivo y lento. No te preocupes, te dices, aunque hoy no confíes en ti y te veas mala persona, sabes que en un tiempo todo esto será diferente, pues habrás aprendido a amarte con pasión y ternura, con respeto y con cuidado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario